¡Hola gente linda! ¡Bienvenidos! ¡Gracias por visitar mi blog y ver lo que tengo para mostrarles! Seguramente ustedes compartirán conmigo el mismo hobby, la misma pasión y placer por hacer cosas hermosas con nuestras manos, así que los invito a embarcarse en un paseo imaginario y juntos recorrer las distintas categorías de mis trabajos.
Pero antes, vayamos un poco atrás en el tiempo…
Hace muchos, muchos años que hago toda clase de manualidades y artesanías; desde que tengo uso de razón recuerdo haber tenido en mis manos lápices, fibras, marcadores, papeles, cartones, felpinas, tijeras, pinceles, letrógrafos, stencils, acuarelas, témperas, pinturas, pátinas, plumines, tinta china, adhesivos, papel maché, telgopor, yeso, brillantinas, purpurinas, telas, pañolenci, terciopelo, arpillera, lanas, cintas, pasamanerías y galones; colorantes, gamuzas, cueros, cuerinas, mimbres, hojas, ramas, semillas, frutos secos o rústicos, maderas duras o blandas, estecas, bolillos, repujadores, gubias, pirograbador, etc, (solo por nombrar algunos materiales e instrumentos de trabajo), porque todas esas cosas me llamaron la atención y me gustaron desde muy niña. Este gusto por hacer cosas con mis manos, lo heredé de mis padres y abuelos; nací con el don de dibujar y poder crear objetos con mucha facilidad, y también de reciclar cosas viejas o deterioradas, transformándolas en algo nuevo. Realmente lo hago con mucha pasión y compromiso, porque lo siento de todo corazón; en cada pieza, cuadro, o lo que sea que esté dándole vida con mis manos, va quedando una partecita de mí… Soy autodidacta, nunca hice un curso de dibujo o de manualidades; cuando voy a crear alguna artesanía, me surgen solas las ideas, o cuando tengo un objeto para reciclar, mi mente vuela imaginando cómo se vería cambiándole su aspecto, sin necesidad de ver o copiar otros modelos (aunque, les cuento una trampita, debo decir que me nutro mucho de revistas o libros de manualidades, o miro programas de artesanos en un canal de televisión, porque tienen un variadísimo contenido, para mantenerme actualizada en cuanto a los nuevos materiales que hay en el mercado y a técnicas se refiere).
Al principio, siendo muy pequeña, lógicamente, hacía cosas muy simples, pero a medida que fue pasando el tiempo, observaba cosas más complejas, entonces fui aprendiendo, probando e innovando con casi todo tipo de materiales y diversas técnicas, y las hacía iguales, o las adaptaba a mi gusto, cambiando algún detalle, y junto a una meticulosa prolijidad, fui creando mi propio estilo, el cual conservo hasta el día de hoy. He usado casi todo tipo de materiales, como así también muchas y diversas técnicas, no obstante, no me gustan el alambre (solo lo uso cuando lo combino con otros materiales), el vidrio (a excepción del espejo,envases o frascos, botellas y damajuanas), ni el modelado de muñecos con pastas.
No me atraen las flores, pero, si es a pedido, hago todo tipo de trabajos con ellas, ya sean pintadas, naturales o artificiales. Trabajo casi todos los estilos; muy colorido y divertido para niños; Naif; Romántico con flores rococó, moños y puntillas; Vintage; ceremonioso como para festejos patrios o eclesiásticos; sobrio para celebraciones de todo tipo y ocasión, como Nacimientos, Bautismos, Comuniones, Confirmaciones, 15 años y todo tipo de Aniversarios, Enlaces, Bodas de Plata, de Oro, de Diamante, Egresados, Ordenaciones; Haloween, country; etc, y también el estilo rústico o la línea “campo”, netamente argentina, que es el que más me gusta y el que más trabajo en la actualidad.
La mayoría de los trabajos que hago quedan para mí, en menor proporción hago algunos para regalar, y también hago para vender. Tal es así, a lo largo de todos estos años he creado infinidad de artesanías, y casi todas son piezas únicas. Pero no solo hice y hago objetos decorativos; también realicé mucho material didáctico.
Partiendo de mi adolescencia, cuando ya había cruzado la barrera de hacer manualidades “en” la escuela, realizaba cosas “para” las escuelas; he creado material didáctico para escuelas primarias y jardines de infantes, tales como carátulas para carpetas, tarjetas alusivas al ciclo escolar; carpetas infantiles, móviles articulados, calendarios, frisos, láminas, dibujos y carteles para todas las materias con todo tipo de material, escarapelas, escudos, banderas y mapas pequeños y a mayor escala, pergaminos (cuando en ese entonces se hacían a mano, con plumín y tinta china); ornamentación de aulas y galerías, tanto en las esteras como en los pizarrones (desde el comienzo de clases hasta las fiestas de fin de año), maquetas en miniatura para mesa de arena, máscaras con globos y disfraces de telas, papel creppe y cartulinas para las veladas de fin de año.
Más adelante, llegó la época de los palitos de madera, el papel vegetal, los lápices pastel, el acetato, la panamina, las plumitas, las lentejuelas, el givré, los caireles, cristales, calotas, canutillos, mostacillas y mostacillones, cadenas y cuentas de bujouterie, el cartón microcorrugado, las parafinas; las gemas, las boinas, floreritos y todo tipo de frascos y envases de vidrio de toda forma y tamaño, la espumina, la goma E.V.A en todas sus variedades, las pinturas puff, por nombrar algunos materiales más, y una increíble infinidad de novedades que fueron apareciendo en librerías, artísticas y cotillones, y con los cuales he creado un sinfín de cosas, combinándolos entre sí, adaptándolos a cada pieza creada, tales como souvenirs, centros de mesa, gorros, sombreros y capelinas; carteles y adornos de pared, farolitos y luminarias de distintos tamaños y todo tipo de objetos de decoración, que, lamentablemente, de la mayoría no guardo registro fotográfico.
También realicé trabajos con madera, madera terciada, palitos de madera, cañas, troncos, mimbre, canastas, latas, cajas de cartón y de madera, adornos con cintas y tejidos rústicos tipo telar; botellas y frascos de vidrio de diversos tamaños y formas, y también damajuanas; cuadros, murales y tapices.
Del vasto mundo de las artesanías hago varias técnicas, pero reconozco que existen muchas más que, aunque las he visto, no sé cómo se hacen, tales como paspartú; cestería con palma o mimbre; trenzado de cuero; fabricación de artículos de cardón, alfarería en terracota o en cerámica negra; tallado o grabado en piezas de piedra; pasta piedra; esculpido o tallado en madera; enmarcado de cuadros, marquetería; taracea; bizcocho cerámico; esculpido y tallado en tiza; porcelana fría; tallado de huevos de distintos tamaños; resina; vitrofusión; vitromosaico; mosaiquismo; venecitas; vitral; fabricación de flores de papel, tela, fieltro o goma E.V.A; arreglos florales; ramos y tocados de novia; ikebana; lanigrafía; crochet; macramé; telar; bordado con cintas; punto cruz; muñequería en general; arte francés; marroquinería; repujado de metales; scrapbooking; pintura en granos de arroz; pintura en interior de frascos y botellas en miniatura; pintura realista; filete porteño; en fin, la lista es muy extensa, seguramente me quedarán muchísimas técnicas sin nombrar simplemente porque no las conozco…
Muchos de ustedes sabrán que antes no había tantos materiales para trabajar como existe ahora; era todo bastante limitado, y además, prácticamente todo se hacía a mano; si se utilizaban moldes, éstos también se hacían a mano, o por lo menos, yo fabricaba la mayoría de mis propios moldes. Hoy, acorde a los tiempos que corren, junto con el progreso y la vida acelerada llegó el facilismo, todo está ya prefabricado, y más aún, todo computarizado, y aunque debo reconocer que tanto lo que ya está fabricado como la tecnología utilizada al servicio de lo artesanal ayudan mucho, insisto que no hay nada más lindo que hacer las cosas con las propias manos; de esta manera tienen otro gusto, quizás no sean tan “perfectas”, pero se puede decir que son realmente artesanales…
En esta etapa en la que me encuentro hoy, tuve la precaución de tomar fotografías de casi todos mis trabajos, y ésta es la muestra que les presento, a la cual, para una mayor apreciación, he dividido en diferentes categorías. Desde ya, los invito a recorrerla deseándoles buen viaje!